El Saber

- Se trata de un invertebrado artrópodo crústaceo decápodo (Kiwa hirsuta), de alimentación omnívora y de una envergadura de 6-15,6cm. Fue descubierto en el pacífico del sur, al sur de la isla de Madagascar en una dorsal océanica. Debido a ello, se puede estimar que habita a tales profundidades y posee grandes adaptaciones en relación con la presión u otros factores abióticos. Se caracteriza principalmente por su pelaje blanquecino que recubre su cuerpo, de ahí su nombre ya que se emparentó con el mítico aunque real yeti, el gigantopitecus. Este pelaje está recubierto por bacterias cuya función se está estudiando. Se estima que son utilizadas en su alimentación y no para mimetizarse con el medio como muchas especies como el perezoso. A su vez, yo pienso que al carecer de ojos, cada una de las fibras que conforman su pelaje actúan como receptores de movimiento detectando por vibraciones a sus presas o depredadores.